Rey de Corintio. 5ª Carta

El día del infortunio, Corintio

A todo aquel que estas líneas lea:

Que mal pude cometer yo? Por que mi hija merecía morir? Porque no pude morir solo yo? Como podéis imaginar escribo estas líneas desde el mas allá bajo la implacable mirada de Hades y rodeado de almas, esa bruja de Medea, maldigo el momento en que sus palabras me creí y un día mas para huir le dí. Todo el mundo lo sabía , Medea no quería a la familia real, y su sed de venganza era enorme  y su astucia superior .

Mi niña , mi hija… ella pago toda su ira, solo quería que ella fuera feliz al lado de Jasón quien le correspondía, y que incluso mi hija aceptó cuidar de sus hijos , quienes  nos llevaron a nuestra tumba, al ponerse ese presente en signo de paz se pegó a su cuerpo a medida que ardía su belleza, su tez , su alegría, sus mejillas sonrojadas, se iban consumiendo , todo el mundo tenia miedo de tocar el cadáver pero yo como padre me acerque sin poder evitarlo y la toqué y la besé , fue mi perdición. 

Pero prefiero morir junto con mi hija y vagar juntos por las tierras de Hades que estar en vida y no tenerla a mi lado.

Poco me importa que pasara después.

Lo que mas me importaba en la vida se murió y yo con ella.

Att: El rey de Corintio

Mónica Baselga 

Imagen: flickrCC